sábado, 21 de enero de 2012

"El otoño se fue instalando calladamente. Con el paso de los días tenía la sensación de que, poco a poco, su cuerpo se iba volviendo transparente. Se esforzó en pensar lo mínimo. Pero no pensar en nada era imposible. Cuando se produce un vacío, siempre hay algo que lo llena. Por lo menos, se consolaba, en ese momento no sentía la necesidad de odiar nada ni a nadie."

Haruki Murakami, 1Q84 (libro 3)

No hay comentarios:

Publicar un comentario